El Movimiento Feminista en su totalidad hace pública la convocatoria oficial de HUELGA GENERAL FEMINISTA para
el próximo 8 de Marzo. Esta iniciativa se suma a la campaña por la Huelga Internacional de Mujeres realizada por
las feministas en distintos países del mundo.
Hacemos un llamamiento a la ciudadanía en general y a todas las mujeres en particular. El próximo 8 de marzo vamos
a paralizar los trabajos, incluso aquellos que realizamos gratuitamente en los hogares y espacios privados.
Nos convocamos para paralizar toda la sociedad desde cuatro ámbitos: hogares, consumo, estudios y trabajos de todo
tipo, legales o de economía sumergida, en la esfera pública o la privada, incluyendo las labores de cuidados en la
sociedad y en la familia; trabajos que nadie ve, o que realizamos por menor remuneración que nuestros compañeros.
¡Basta ya de tantas violencias y desigualdades!
Convocamos para hacer frente a un modelo patriarcal que demoniza, en nosotras, las mismas funciones que son
imprescindibles para el desarrollo, avance y crecimiento de la sociedad.
Convocamos para que comencemos a desmontar los estereotipos, los prejuicios y la opresión a la que nos someten los
modelos impuestos desde una construcción androcéntrica de la historia y de la sociedad que nos quiere fuera de la
esfera pública y los espacios de poder y de representación.
¡Basta ya de la disposición y manipulación de nuestros cuerpos y de nuestras vidas!
No somos mercancías ni objetos al servicio de deseos ajenos.
Vamos a dejar de ser consumidoras. Los mercados nos sancionan doblemente, solo por ser mujeres. Por un lado, los
productos que nos son imprescindibles, son considerados artículos de lujo. Por otro lado, queremos acabar con la lógica
comercial por la cual los productos se encarecen simplemente por cambiar el color: rosa por azul o por añadir una
etiqueta: mujer/hombre.
Pero, además, Queremos dejar de ser modelo/producto de consumo.
¡Basta ya del dictado de normas sobre nuestra apariencia física! Nuestros cuerpos no deben ser reclamo para incitar
al consumo.
Vamos a dejar vacías las aulas. Hagamos patente que nosotras somos las maestras y profesoras de los primeros tramos
educativos. Visualicemos la desigualdad existente en la docencia y puestos de responsabilidad en la Universidad.
Recordemos que nuestros expedientes académicos son brillantes, que somos mayoría en los estudios universitarios y
que, a pesar de ello, la brecha de género no nos permite acceder a los puestos que nos corresponden por derecho y
méritos propios. Los puestos más altos en política y empresas están copados mayoritariamente por hombres. Ellos son
quienes toman las decisiones.
¡Basta ya de techos de cristal!
No vamos a consentir que ser mujer sea la principal causa de pobreza, con más incidencia si se es mayor de 45 años,
migrante, racializada o trans. Esta precariedad nos lleva a ser trabajadoras a tiempo parcial sin haberlo deseado y la
mano de obra más expuesta al paro.
El embarazo no puede ser objeto de despido o de marginación laboral, ni debe menoscabar expectativas vitales,
personales ni profesionales
Exigimos prestaciones sociales que permitan llevar a cabo las labores de crianza, cuidado y acompañamiento familiar
en condiciones de igualdad de género y dignidad para todas las personas implicadas. Queremos que se entiendan los
cuidados como un bien social de primer orden, de sustento de la vida y de corresponsabilidad.
No queremos seguir siendo la mano de obra gratuita que compensa los recortes presupuestarios en salud, servicios
sociales y educación.
No estaremos TODAS este año. Cada año nos ASESINAN, como un sacrificio ante el patriarcado. Denunciamos la
ausencia de políticas que terminen con los feminicidios. El recién firmado Pacto de Estado debe, necesariamente,
ir acompañado de presupuestos que doten de medios y recursos para el desarrollo de políticas reales y efectivas
encaminadas a conseguir una sociedad libre de violencia de género.
Denunciamos la violencia a la que se nos somete por el simple hecho de ser mujeres. Una violencia que nos
amenaza de manera física, verbal, económica, médica y moral, que nos viola, que nos acosa,nos minusvalora,
que abusa de nosotras. Violencia social, institucional y sistemática.
Queremos denunciar la justicia patriarcal que no nos considera sujetas de pleno derecho.
Denunciamos, como ciudadanas, la corrupción como causa fundamental de la crisis y recortes sufridos.
Denunciamos, como ciudadanas, la grave represión y recortes de derechos que estamos sufriendo a través de
la aprobación de leyes que nos reprimen y empobrecen.
Denunciamos que nuestras hermanas procedentes de otras culturas y que viven en este país no sean reconocidas
como sujetas con plenos derechos, añadiendo su condición de migrantes a la de ser mujeres en una intersección
de gran vulnerabilidad.
¡Basta ya de racismo y exclusión!
Denunciamos también la homofobia y la transfobia tanto social como institucional que sufren muchas compañeras,
como otra forma más de violencia machista, pues no son tampoco reconocidas como sujetas con plenos derechos,
añadiendo su condición a la de ser mujer ¡Basta ya de opresión por nuestra identidad sexual!
POR TODO ESTO CONVOCAMOS A HUELGA GENERAL FEMINISTA EL 8 DE MARZO.
NOS QUEREMOS VIVAS
NOS QUEREMOS LIBRES
FEMINISTAS REBELDES Y DESOBEDIENTES
correos: huelgafeminista2018@gmail.com
asambleafeministaburgos@gmail.com
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