¡Mi sexualidad no es una enfermedad, tu discriminación sí!
Un año más, y con motivo de tal día como este: 17 de mayo, día internacional contra la homofobia, lesbofobia y transfobia, desde la Asamblea Feminista de Burgos seguimos reivindicando que la diversidad de orientaciones sexuales es amplia y muy variada, pero no por ello una patología como se consideraba hasta 1990; tratada como una grave enfermedad mental.
Se conocen casos de actos atroces para intentar “curar” a quienes se declaraban de una orientación u otra con tratamientos farmacológicos, psicológicos y extremistas como las electrocuciones causando, y esta vez sí, enfermedades severas en la persona afectada. Y a día de hoy seguimos viendo casos de discriminación tales como los campos de concentración de Chechenia.Así actuaba y sigue actuando el sistema patriarcal hacia quienes se salen del molde de la heteronormatividad.
Desde la Asamblea Feminista, celebramos que la homosexualidad ya no sea considerada una enfermedad pero condenamos que todavía haya países en el que es penada con persecuciones y castigos de distinta índole según haya sido cometido el “delito”. Los castigos van desde latigazos, cárcel, palizas o incluso la pena de muerte.
En el Estado Español aún un 65% de los y las trabajadoras LGTB oculta su orientación. Mientras, entre el alumnado, una encuesta realizada a 700 jóvenes que habían sufrido acoso escolar por su orientación sexual no normativa, los datos revelaron que el 43% había ideado alguna vez el suicidio aunque la encuesta no incluía a menores transexuales ya que la transexualidad permanece en la lista de las patologías aunque la lucha para que sea retirada continúa y los 24 de octubre se celebra el Día Internacional por la Despatologización Trans. Países como Irlanda, Argentina, Dinamarca o Malta tienen en su legislación la autodeterminación de género, de forma que sea cada persona, en uso de su libertad individual y sin necesidad de justificación médica o psicológica alguna. Mientras que aquí se sigue presumiendo de vanguardismo en derechos LGTB, no se ha llegado todavía a esa meta.
Es en éste país que presume de vanguardia en el que las agresiones a gays, lesbianas y transexuales han aumentado considerablemente por ataques de la extrema derecha que aumenta cada vez más. Ciudades grandes como Madrid, han presenciado en sus calles las agresiones al colectivo LGTB, agresiones que desde la Asamblea Feminista de Burgos condenamos y despreciamos.
Durante años el colectivo LGTB+ ha tenido que esconderse porque salirse de los moldes del heteropatriarcado traía consecuencias, ahora, en pleno S. XXI, es inadmisible que se sigan produciendo persecuciones y agresiones.
Con todo ello, desde la Asamblea Feminista de Burgos seguiremos luchando contra los sistemas patriarcal y capitalista los cuales perpetúan las opresiones tanto de las mujeres como del colectivo LGTBI+. Denunciando a la vez las agresiones y las discriminaciones que seguimos sufriendo y saliendo siempre a la calle desde los colectivos feministas con un espacio propio para el colectivo LGTB que lidere esta lucha tan necesaria a día de hoy. ¡La lucha contra el patriarcado es una lucha de todos y de todas!
Un año más, y con motivo de tal día como este: 17 de mayo, día internacional contra la homofobia, lesbofobia y transfobia, desde la Asamblea Feminista de Burgos seguimos reivindicando que la diversidad de orientaciones sexuales es amplia y muy variada, pero no por ello una patología como se consideraba hasta 1990; tratada como una grave enfermedad mental.
Se conocen casos de actos atroces para intentar “curar” a quienes se declaraban de una orientación u otra con tratamientos farmacológicos, psicológicos y extremistas como las electrocuciones causando, y esta vez sí, enfermedades severas en la persona afectada. Y a día de hoy seguimos viendo casos de discriminación tales como los campos de concentración de Chechenia.Así actuaba y sigue actuando el sistema patriarcal hacia quienes se salen del molde de la heteronormatividad.
Desde la Asamblea Feminista, celebramos que la homosexualidad ya no sea considerada una enfermedad pero condenamos que todavía haya países en el que es penada con persecuciones y castigos de distinta índole según haya sido cometido el “delito”. Los castigos van desde latigazos, cárcel, palizas o incluso la pena de muerte.
En el Estado Español aún un 65% de los y las trabajadoras LGTB oculta su orientación. Mientras, entre el alumnado, una encuesta realizada a 700 jóvenes que habían sufrido acoso escolar por su orientación sexual no normativa, los datos revelaron que el 43% había ideado alguna vez el suicidio aunque la encuesta no incluía a menores transexuales ya que la transexualidad permanece en la lista de las patologías aunque la lucha para que sea retirada continúa y los 24 de octubre se celebra el Día Internacional por la Despatologización Trans. Países como Irlanda, Argentina, Dinamarca o Malta tienen en su legislación la autodeterminación de género, de forma que sea cada persona, en uso de su libertad individual y sin necesidad de justificación médica o psicológica alguna. Mientras que aquí se sigue presumiendo de vanguardismo en derechos LGTB, no se ha llegado todavía a esa meta.
Es en éste país que presume de vanguardia en el que las agresiones a gays, lesbianas y transexuales han aumentado considerablemente por ataques de la extrema derecha que aumenta cada vez más. Ciudades grandes como Madrid, han presenciado en sus calles las agresiones al colectivo LGTB, agresiones que desde la Asamblea Feminista de Burgos condenamos y despreciamos.
Durante años el colectivo LGTB+ ha tenido que esconderse porque salirse de los moldes del heteropatriarcado traía consecuencias, ahora, en pleno S. XXI, es inadmisible que se sigan produciendo persecuciones y agresiones.
Con todo ello, desde la Asamblea Feminista de Burgos seguiremos luchando contra los sistemas patriarcal y capitalista los cuales perpetúan las opresiones tanto de las mujeres como del colectivo LGTBI+. Denunciando a la vez las agresiones y las discriminaciones que seguimos sufriendo y saliendo siempre a la calle desde los colectivos feministas con un espacio propio para el colectivo LGTB que lidere esta lucha tan necesaria a día de hoy. ¡La lucha contra el patriarcado es una lucha de todos y de todas!
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