Nos relegaron al ámbito privado, al hogar, a l@s hij@s, al ámbito de los cuidados como un mandato explicito para la mujer.
Nos han negado el acceso a la educación, al placer, al goce, al disfrute...
Nos han restringido el manejo de nuestra economía.
Nos han quitado el derecho a decidir.
Hasta hace dos días eramos propiedad primero de nuestros padres y luego de nuestros maridos, consideradas rehenes y trofeos de guerra.
Opinan y decide sobre nuestros cuerpos, ropas, apariciones, profesión, ideología, gustos...
Nos etiquetan como ciudadanas de segunda.
Nos violan.
Nos matan.
Por ello: Eleva tu conciencia, mujer! Rebélate, organízate!
Porque solo organizadas recuperamos lo que es nuestro.
¡Que viva la lucha feminista!
Ni sumisas, ni pasivas!
Johanna, argentina en la diáspora y militante de la Asamblea Feminista de Burgos
Imagen: Alicia Esclapez
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